Ritmos de trabajo altos, plazos límites, horas de concentración. Se requiere una mente preparada, y para ello es indispensable saber desconectar.
Es cierto que, determinados tipos de trabajo, ocupan nuestra mente durante largas horas, incluso fuera de nuestro horario laboral. A veces, esto, nos permite organizarnos, obtener ideas. Pero ¿realmente es sano? Esto puede derivar en un cuadro de estrés, en que las ideas sean confusas, que las soluciones no sean las correctas, y al final, debemos invertir aún más tiempo en obtener buenos resultados.
Al final puede resultar frustrante, el trabajador puede estar apático, y la productividad baja. De ahí la necesidad de la relajación, practicar yoga o mindfulness, puede ayudar a nuestro cerebro a tranquilizarse y pensar con lógica. A veces menos es más, y la sencillez de ideas nos puede ahorrar mucho tiempo.
Es necesario tomar distancia para lograr cierta objetividad. Y eso solo se puede lograr a través de la organización, desconexión y meditación.
En Verker Recursos Humanos queremos fomentar esos minutos de meditación. Es, para nuestro equipo, tan importante como practicar deporte o llevar una vida saludable. Por ello nos marcamos estas pautas:
- Antes de comenzar, miro mis tareas pendientes y planifico mi jornada. Es fundamental que todos los trabajadores lleven una agenda o calendario donde poder anotar todas las tareas o eventos. Es importante, al principio o al final de cada jornada, revisar qué tareas pendientes tenemos y priorizar por importancia de cada una de ellas.
- Cuando acabo mi trabajo, acaba mi jornada Desconectemos. Si algo no es de máxima urgencia, siempre puede esperar unas horas. Tómate algo por ahí, sal a cenar, ve a ver una exposición. La mente necesita salir del trabajo también, para no agotarla. Hacer aquello que nos gusta, con lo que disfrutamos más, o simplemente descansar, ayudará a nuestro cerebro a reponerse de las horas laborales.
- Dedico unos minutos a respirar profundo Meditar también debería comenzar, en según que sectores, a ser un ejercicio diario. Un momento de paz y conexión contigo mismo, con tu cuerpo y mente. La clave está en la respiración, en concentrarse en ella y sentirla. Con unos minutos diarios podrás comprobar cómo se va callando poco a poco tu cabeza.
Aunque practiques deporte o tengas hobbies que ocupen tu mente fuera de horas de trabajo, es importante aprender a relajarse. Y decimos aprender, porque muchas veces no sabemos, y ese es uno de los mayores focos para problemas de ansiedad y estrés.
Si crees que nuestros valores e ideas como empresa de consultoría en RRHH casan con las tuyas o las de tu corporación, no dudes en ponerte en contacto con nosotros a través de info@verker.es , nos encanta escuchar propuestas y sabemos que la única forma de avanzar es mediante la colaboración.